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Asociación Ecologista
Nueva Tierra

hojas.jpg (2979 bytes) BIODIVERSIDAD
Un Recurso No Valorado

La diversidad biológica, es la variabilidad entre los organismos vivientes, terrestres, marinos y acuáticos y los complejos ecológicos de los cuales forman parte; esto incluye la diversidad dentro de las especies, entre especies, y dentro y entre los ecosistemas.
La diversidad cultural humana podría considerarse como parte de la biodiversidad. Ya que cuenta con algunos atributos que podrían considerarse soluciones a problemas de supervivencia en determinados ambientes (nómades, rotación de cultivos). Además ayudan a las personas a adaptarse a la variación del medio. La diversidad cultural se manifiesta en, la diversidad del lenguaje, de las creencias religiosas, de las prácticas de manejo de la tierra, en el arte, en la música, en las estructuras sociales, en la selección de cultivos, en la dieta y todo atributo de la sociedad.

El Convenio de las Naciones Unidas sobre Diversidad Biológica, afirma que la conservación de la diversidad biológica es una preocupación común de la humanidad, pero reafirmando que los Estados tienen derechos soberanos sobre sus recursos naturales. La organización Mundial para la Alimentación y Agricultura (FAO) sugirió ya en 1991, que los recursos genéticos son propiedad inalienable de cada país.
Gran parte de los ecosistemas menos alterados en su biodiversidad de todo el planeta se encuentran en Latinoamérica (Patagonia, Amazona, bosques tropicales de montaña, las concentraciones de fauna marina atlántica o del Pacífico sur y los Tepuyes a ellos debe sumarse además la Antártida).

En estos ámbitos naturales se encuentra una enorme riqueza genética, lo cual motiva a los principales laboratorios del mundo, a que estén identificando elementos vegetales y animales que den origen a nuevas producciones farmacéuticas y alimenticias. Mueven inversiones millonarias, las que muy probablemente serán compensadas por los valores millonarios de los nuevos productos a lograr. Como ejemplo de lo anterior se puede mencionar que: De una enredadera amazónica proviene un nuevo tratamiento contra la leucemia. Algas del sur posibilitaron terapias para problemas cardiovasculares. Genes latinoamericanos permitieron duplicar cosechas de granos europeas. (Antonio Torrejón).
Somos totalmente dependientes del capital biológico. La diversidad dentro y entre las especies nos han proporcionado alimentos, maderas, fibras, energía, materias primas, sustancias químicas, industriales y medicamentos. Los recursos bióticos también sirven para los fines del esparcimiento y turismo. Por lo que se puede afirmar que tanto la biodiverisidad como las actividades relacionadas con el turismo que se realizan dentro de dichas regiones contribuyen con cientos de millones de dólares anuales a la economía mundial.

El caudal genético de las formas de vida ayuda al reciclamiento gratuito de recursos, (agua) y a los servicios de purificación y de control natural de plagas.
El potencial desconocido de los genes, de las especies y de los ecosistemas constituye una frontera biológica inalcanzable de valor inestimable, pero ciertamente elevado. La diversidad genética permitirá adaptar los cultivos a nuevas condiciones climáticas.
La diversidad específica actual consta estimadamente de 40 a 80 millones de especies diferentes, cada una con variaciones en su información genética, que viven en una variedad de comunidades biológicas. Se han clasificado y descripto aproximadamente 1,5 millón de especies, es decir una muy pequeña proporción del total.
Los bosques tropicales constituyen el almacén clave de la diversidad biológica del mundo.

El mismo fue desarrollado por 100 millones de años de actividad evolutiva, (formando un banco genético irremplazable). Ocupan sólo el 6 % de la superficie terrestre, y viven en ellas más de la mitad de todas las especies de la tierra.
Las especies silvestres se encuentran entre los principales recursos de que dispone el hombre, y los menos utilizados. Estas encierran enormes reservas de productos valiosos sustitutos de fibras y de petróleo. Un ejemplo de esto es la palmera babassu, (Orbingnya phalerata, Amazonas) una plantación de 500 árboles produce 125 barriles de aceite al año.
La pérdida actual de biodiversidad es muy rápida, por lo que no puede ser equilibrada por la formación de nuevas especies, ya que se necesitan entre 2.000 a 100.000 generaciones para que evolucione una nueva especie. La tasa de extinciones inducidas por el hombre se esta acelerando. La presión más fuerte se ha ejercido sobre ambientes aislados o netamente delimitados (islas, lagos). Las pluviselvas tropicales ya se han reducido por tala o incendios, aproximadamente al 55 por ciento de su extensión original (Edward Wilson).

La reducción de biodiversidad es una consecuencia directa del desarrollo humano, ya que muchos ecosistemas han sido convertidos en sistemas empobrecidos que son menos productivos, económica y biológicamente. Se podría decir que, el uso inadecuado de los ecosistemas además de perturbar su funcionamiento también implica un costo.
La biodiversidad se ve amenazada por el cambio climático provocado por el efecto invernadero. Se considera posible un cambio de clima en dirección de los polos a un ritmo de 100 Km por siglo, lo que arrasaría reservas naturales y áreas de distribución de especies enteras, muchas clases no podrían migrar con la rapidez suficiente para persistir.

De la importancia de la biodiversidad surge la necesidad de que la autoridad de los países asuman la responsabilidad indelegable de la conservación de su biodiversidad. Así como también, surge la necesidad de realizar acciones conjuntas entre los distintos niveles políticos y económicos que tengan intervención o intereses creados en la misma zona pudiendo ser estos nacionales o locales, compartiendo las responsabilidades entre las distintas jurisdicciones que intervengan, en respuesta a la falta de una armonización geográfica natural y no por límites ya existentes, y a los requisitos o características internacionales vigentes.

Dicha importancia es explícita, en el Convenio sobre la Diversidad Biológica, Naciones Unidas, 1992, en su Artículo 1- se establecen los objetivos: "Que se han de perseguir de conformidad con sus disposiciones pertinentes, son la conservación de diversidad biológica, la utilización sostenible de sus componentes y la participación justa y equitativa en los beneficios que se deriven de la utilización de los recursos genéticos, mediante, entre otras cosas, un acceso adecuado a esos recursos y una transferencia apropiada de las tecnologías pertinentes, teniendo en cuenta todos los derechos sobre los recursos y a esas tecnologías, así como mediante una financiación apropiada."
Uso sostenible, se refiere al empleo de los componentes de la diversidad biológica en modo y ritmo tales que no se produzca, a lo largo del tiempo ninguna reducción de la biodiversidad, con lo cual se mantiene su potencial para satisfacer las necesidades y aspiraciones de las generaciones actuales y futuras.
Como la biodiversidad guarda relación estrecha con las necesidades humanas, su conservación debería considerarse como un elemento de seguridad nacional. Una nación segura es fuerte, con una población saludable y educada, así como un medio ambiente saludable y productivo. Puede decirse que cada país tiene tres tipos de riquezas, material, cultural y biológica. Está última no es considerada, lo que constituye un grave error estratégico.

La conservación de la diversidad biológica supone un cambio de actitud: desde una postura defensiva (protección de la Naturaleza frente a las repercusiones del desarrollo) hacia una labor activa que procure satisfacer las necesidades de recurso biológicos de la población al mismo tiempo que se asegura la sostenibilidad a lo largo del tiempo de la riqueza biótica de la Tierra.
Existen ciertas medidas para retardar el proceso de extinción de la diversidad biológica como: Ampliar los inventarios taxónomicos y sus bibliotecas de referencia con el fin de cartografiar las especies e identificar prioridades

 

GABRIELA MEDRANO